domingo, 2 de agosto de 2020

SOBRE HERRAMIENTAS DIGITALES Y EDUCACIÓN A DISTANCIA


¡Hoooola a todos!

Después de una semanita de desconexión, quiero compartir en esta entrada un par de reflexiones sobre herramientas digitales y educación a distancia.

La educación a distancia (igual que la educación presencial) no es un tema de herramientas, es un asunto de pedagogía y metodología. Es una cuestión de tener claros los objetivos y el contexto y de saber qué hacer para que todos los alumnos puedan alcanzar esos objetivos. 

Entonces, ¿qué papel tienen las herramientas digitales en todo esto? En mi opinión está claro: un papel facilitador. En un contexto como el actual, es evidente que necesitamos usarlas tanto nosotros como nuestros alumnos para poder alcanzar los mencionados objetivos.

La pregunta siguiente está clara: ok, usaremos herramientas digitales, pero ¿cuántas y cuáles?

Mi respuesta personal a esta importante pregunta es la siguiente: 
  • Deben ser pocas y se han de elegir antes de empezar el curso en función de las necesidades pedagógicas previstas. 
  • Debería ser una elección consensuada entre los docentes del mismo nivel (mejor aún del mismo centro).
  • Elegir herramientas polivalentes nos ayudará a adelgazar el número total de las mismas.
  • Siempre habrá que apuntar hacia herramientas de fácil manejo y multiplataforma, que se adapten a los contextos de cada alumno. 
  • Por supuesto, mejor si son gratuitas. Pero que respeten la intimidad de nuestros alumnos y que no tengan mucha publicidad.
  • No improvisar en función de las herramientas “molonas” que vaya conociendo el docente. Por mucho que te gusten, plantea guardarlas para el curso próximo y no bombardear a tus alumnos, familias y programación con nuevas incorporaciones de última hora.
Haciendo esta selección conseguiremos que los alumnos, los profes y las familias no se dediquen a aprender nuevas herramientas para cada asignatura, para cada función, para cada profe... por no hablar de la inmensidad de contraseñas diferentes que nos ahorramos.

Por otro lado, a los alumnos les facilita la transición de un curso a otro sin tener que aprender nuevas herramientas y a los profes les permite hacer formación conjunta sobre las herramientas, así como apoyarse unos a otros.

A todo este proceso yo lo llamo “economía de herramientas” y considero que es una práctica muy útil a la hora de programar tanto en formación presencial como a distancia.

En el lado negativo, dos reflexiones muy personales: 

Antes hemos comentado la ventaja que supone para un alumno no tener que aprender una herramienta nueva para hacer lo mismo cada vez que cambia de profesor o de curso. Aquí me gustaría matizar que esto podría considerarse igualmente un inconveniente: Cuantas más herramientas diferentes sea capaz de manejar un alumno, más sencillo será para él aprender a manejar nuevas herramientas en el futuro. Y estamos seguros de que en su futuro laboral, adaptarse al aprendizaje de nuevas herramientas digitales será una de las habilidades que más van a necesitar. También hay que tener en cuenta que no nos podemos pasar el día aprendiendo y enseñando herramientas digitales nuevas... tenemos muchas otras cosas importantes que aprender. En fin, como decía Aristóteles, en el término medio está la virtud.

Y por último, me gustaría también invitar a la reflexión sobre la idoneidad ética de utilizar una misma herramienta (de una empresa determinada u otra) para realizar una función durante toda la educación obligatoria. En mi opinión, esto podría generar una falsa impresión en nuestros alumnos identificando la función con la herramienta. Pongo dos ejemplos que supongo que aclaran esta teoría: Si un alumno ha utilizado siempre los Documentos de Google (cambiesé el ejemplo por cualquier otra empresa) para escribir sus textos académicos, es posible que identifique un procesador de textos con “ese” procesador de textos. Esto podría compararse con un colegio que pidiera a sus alumnos que trajeran a las clases de Educación Física “unas Nike” en lugar de unas zapatillas.
Y por si pueden ayudar a la reflexión y selección de herramientas, aquí tenéis un Genially con una amplia selección en función de los usos y un "Top Ten" mío personal:





Espero que os guste.

Sr. Ruiz.

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