¡Hoooooola a todos!
Sí, ya lo sé, si te metes de vez en cuando en el blog para ver si hay novedades, supongo que habrás dejado de hacerlo pensando que lo he abandonado por completo... Si estás suscrito al blog por RRSS o email, te habrá sorprendido una nueva entrada, y el título de esta aclara en parte la falta de actividad estos últimos meses.
Desde la creación del blog, el objetivo fue tener un lugar en el que organizar mis cosas, plasmar por escrito mis pensamientos y compartir lo que voy aprendiendo, pero sin ningún tipo de atadura o periodicidad.
Este curso estoy disfrutando de un año sabático que programé hace cinco con la intención de desconectar, aprender nuevas cosas, escribir, y acabar proyectos eternamente abiertos… La realidad es que en el transcurso de estos años, han nacido mis dos maravillosas hijas, Daniela y Abril, y el objetivo de mi año sabático ha cambiado (para mejor) radicalmente.Por eso, el primer trimestre he tenido la suerte de dedicárselo a ellas 100%.